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El Quinto Evangelio.- Basamentos Gnósticos de lo Paranormal

BASAMENTOS GNÓSTICOS DE LO PARANORMAL

  ...Que nosotros estamos estudiando cuestiones meramente científicas. En modo alguno nos estamos dirigiendo contra los miembros de tal o cual Religión; respetamos todas las religiones. Solamente nos estamos ocupando de Ciencia, y por la tanto, nadie debe sentirse aludido, puesto que no estamos mencionando asuntos religiosos.

En realidad de verdad, cuando uno ahonda dentro del campo de la Ciencia descubre cosas maravillosas. Los científicos han podido estudiar la mecánica de la célula viva. Pero, ¿qué saben los científicos sobre el FONDO VITAL?

Los científicos han podido inventar cohetes atómicos que llegan a la Luna o a Marte, o a cualquier otro planeta del Sistema Solar. Pero hasta ahora no han podido inventar, un germen vegetal, susceptible de germinar.

Si ponemos sobre la mesa de un laboratorio los elementos científicos o químicos que se necesitan para crear un germen vegetal, estoy seguro de que podrían los científicos elaborarlo, pero este sería un germen completamente muerto, no germinaría.

Se hacen inseminaciones artificiales. Una mujer estéril, hoy en día, puede ser inseminada científicamente y concebir. Es claro, podría suceder que el marido no fuese fecundo, pero si a ella se le inyecta o se le trasplanta un zoospermo, podría concebir y tener una criatura.

Los científicos andarían diciendo (y lo han dicho muchas veces): “¡Ya podemos crear vida; podemos hacer seres humanos en las cubetas de laboratorio!”. No se dan cuenta estos científicos que lo que están haciendo es jugar con la Mecánica de la Naturaleza; que el zoospermo que han pasado de un organismo a otro organismo no ha sido creado por ellos. Unicamente lo han utilizado, pero no lo han creado.

Si los hombres de ciencia pudieran crear vida, ya serían verdaderos Dioses en el sentido completo de la palabra; pero no pueden.

Si ponemos las materias químicas que se necesitan para la creación de un zoospermo y de un óvulo sobre la mesa de un hombre de ciencia, éste hasta podría crear el zoospermo y el óvulo, pero, sí podemos estar seguros que de allí no saldría un niño. Sería un zoospermo y un óvulo muertos, completamente.

Nuestro gran compatriota Mexicano, el sabio ALFONSO HERRERA (quien fuera también compañero de investigaciones científicas del Dr. Arnoldo Krumm Heller, Médico-Coronel del ejército de nuestro país), logró crear la CÉLULA ARTIFICIAL. Pero ésta fue una célula muerta, nunca tuvo vida...

En una ocasión, discutía un ateo con un religioso. El clima llegó, por último, al famoso caso aquél que forma círculo vicioso, relacionado con la gallina y el huevo:

¿Quién fue primero? ¿La gallina?

No el huevo.

¿Y quién puso el huevo?

La gallina.

¿Y quién fue entonces el primero?

La gallina.

¿Y de dónde salió la gallina?

Pues, del huevo...

Total, que eso no tiene un fin jamás, nunca. Por último, el religioso le dijo al científico:

¿Usted podría crear el tan cacareado huevo? Contestó el científico:

Sí, puedo crearlo...

¡Entonces hágalo!

El científico lo hizo. Ustedes no deben ignorar que hoy en día, en Alemania, se hacen huevos

artificiales y que los exportan para distintos países. Claro, similares a los naturales, en la misma forma en que hay plantas que adornan las oficinas y las casas pero que son artificiales, una imitación de las naturales...

Bueno, el científico de mi cuento, sucedió que hizo el huevo (y muy bien hecho). Ya que lo presentó, le dice el religioso:

Bueno, aquí hay una gallina clueca, ahora, eche usted ese huevo a la gallina, para ver si sale un pollo. Conclusión, el científico dijo:

Claro esta que sí! Yo estoy seguro de que sale; Porque he puesto los elementos químicos necesarios y hasta he elaborado los gérmenes, y todo, químicamente...

– Bueno pues, échelo. Y lo echó...

La pobre gallinita se alegró, creyó que iba a salir de por ahí algún nuevo polluelo. Pasaron los días, los 15, los 20 días, el mes, los dos, los tres [meses]... ¡Nunca salió el polluelo! Entonces, el científico, claro está, quedó completamente reducido a polvareda cósmica; había fallado en el experimento.

Así que muchos Ateos-Materialistas, se han declarado enemigos de lo Divinal. Pero no tienen bases en que apoyarse, porque no son capaces de crear, ni siquiera, el germen de la más insignificante hierba, de esas que crecen en la Naturaleza.

Entonces, si no han podido desplazar a eso que se llama Dios, ¿en qué se basan para refutarlo y negarlo? En realidad de verdad, si no hay una base, si no hay hechos concretos, pues entonces, la Dialéctica Materialista (que afortunadamente ya está pasando de moda), queda, de hecho, reducida a polvareda cósmica.

Hoy por hoy, los religiosos de toda secta o creencias, etc., han ganado la batalla. Porque los científicos no han demostrado poder crear vida. Logran dividir la ameba y un pedazo mezclarlo con otro organismo, y sacan de allí una especie de criatura monstruosa, que medio vive unos días y al fin muere. Y entonces lanzan el grito a todo el Universo, dicen: “¡Estamos creando vida; ya nosotros somos Dios!”

¡Bah!, la pobre ameba por ahí muere. Conclusión: puro escándalo, propaganda, y nada más; ésa es la cruda realidad de los hechos. La Divinidad no ha podido ser derribada, hasta ahora, por los Ateos-Materialistas, enemigos del Eterno. Ellos han fallado porque no son capaces de crear vida...

En cierta ocasión, un hombre echó en el centro de un vaso que contenía agua, una gota de aceite. Posteriormente, con un palillo, empezó a hacer girar aquella agua y la gota de aceite; entonces de la gota se desprendieron otras gotas que siguieron girando alrededor de la gota central. Y lleno de orgullo, inflado de soberbia grito diciendo: “¡Eureka, eureka, eureka! ¡No he necesitado a Dios para hacer el Universo; así fue como se creó, he ahí la creación del mundo! ¡Eureka!”

Pero no se daba cuenta el pobre hombre, que él estaba haciendo en ese momento el papel de Dios, pues si no hubiera movido la gota de agua dentro de sí misma, en el centro..., ¡digo!: la gota de aceite, en el centro del vaso, pues nada de eso se hubiera sucedido.

De manera que entonces, el hombre estaba errando por la base: estaba representando en ese momento el papel de la Divinidad y sin embargo lo estaba negando. ¡He ahí lo absurdo!...

Obviamente, en esta gran batalla entre el MATERIALISMO y las RELIGIONES, las Religiones de todos los países de la Tierra (sin diferencia de una o de otra), ganaron la batalla.

Continuando, prosiguiendo, diremos lo siguiente: más allá del Asiento Vital Orgánico existe el Ego, es decir, el Yo de la Psicología Experimental. Este Yo, ha podido ser fotografiado con placas muy finas...

Voy a narrarles algunas investigaciones y experimentos, hechos con la gran médium EUSAPIA PALLADINO de Nápoles...

En presencia de esta extraña mujer se sucedían los fenómenos metafísicos más raros: algunas mesas se levantaban en el aire, extrañas figuras aparecían o desaparecían, etc. Esto era un verdadero escándalo en Nápoles, Italia.

Fue entonces cuando vinieron científicos de todos los países de Europa, a estudiar el caso; decían: “Vamos a desenmascarar el fraude”. Todos esos científicos eran incrédulos en un ciento por ciento, Ateos, Materialistas. Y decían: “Vamos a desenmascarar el caso”...

Empezaron por crear un laboratorio para las investigaciones (un laboratorio donde nada faltaba). Había muy buenos aparatos de fotografía, había un papel fosforescente, una caja de acero herméticamente cerrada, conteniendo adentro un aparato musical, mas tal caja estaba cargada con electricidad en alta tensión; algunos platos con harina, o con yeso en polvo para plasmar figuras, manos, rostros, etc.; había también básculas muy finas, delicadas, que podían hasta pesar hasta las milésimas de cualquier sustancia; había bandolinas que intencionalmente se colocaron en el piso, etc.

Se examinó a aquella mujer psíquica con el propósito de conocer bien a fondo su patología, etc. Hubo exámenes de orina, exámenes de sangre, y en general, pues, los exámenes resultaron satisfactorios.

Se le sentó ante una mesa en una silla muy bien asegurada, de modo que no pudiera moverla (fijada al piso); de lado y lado habían postes de hierro; la mujer fue encadenada a esos postes; se le atravesaron los agujeros de sus oídos con alambres eléctricos, todo su cuerpo fue envuelto en alambres eléctricos. Un científico de un lado de ella la controlaba, otro, del otro lado, también la controlaba. Cualquier movimiento por insignificante que ella intentara hacer, era más que suficiente como para que sonará, instantáneamente, un timbre.

Así es como los científicos querían, de una vez y para siempre, desenmascarar el fraude. Todos ellos eran Materialistas, Ateos, Marxistas, incrédulos en un ciento por ciento; ahí no había ningún creyente, ninguna persona espiritual.

Reunidos en plena sesión, alrededor de aquella mesa, a los pocos minutos (la misma) flotó en el espacio violando la Ley de la Gravedad Universal. De inmediato los científicos tomaron fotografías, verificaron la realidad del hecho, examinaron cuidadosamente el fenómeno, y pudieron, con asombro inaudito, darse cuenta exacta de que de verdad estaba acaeciendo un fenómeno de levitación.

No pudieron negarlo. Tampoco encontraron una teoría Materialista capaz de explicarlo. Aquellos hombres tan apasionados por el Materialismo gruñeron enojados, furiosos, al ver que sus teorías se iban al suelo, se volvían polvo...

Otro hecho que llamó la atención tremendamente, fue el de la aparición de la MADRE DE BOTAZZI (un gran científico, físico). Aquella figura de su madre apareció en pleno laboratorio... Aceptemos que Botazzi hubiese estado alucinado o loco, pero las placas fotográficas no estaban alucinadas y los científicos incrédulos que allí había, tampoco estaban alucinados.

Y fue debidamente registrada la fotografía de la madre de Botazzi. Ésta avanzó por entre los científicos incrédulos y abrazó a su hijo con inmenso amor, exclamando: “¡Hijo mío!”. Y aquel hijo, con lágrimas en los ojos, también abrazó a su madre (había ella muerto 25 años atrás)...

El hecho era patético y ninguno de aquellos hombres incrédulos pudo negarlo, máxime, cuando después se rebelaron las placas fotográficas y allí apareció ella, la misma. Son hechos, y ante los hechos tenemos que rendirnos, o de lo contrario, nos convertiremos en necios...

El instrumento musical que se hallaba encerrado dentro de una caja de acero, cargada, ésta última, con electricidad a alta tensión, resonó con una deliciosa melodía en aquel laboratorio. ¿Quién lo tocó? ¿Por qué resonó? En verdad que si alguna persona hubiese intentado tocar esa caja, habría caído electrocutada.

En el piso había una bandolina; ésta levitó, por sí misma, en la atmósfera de aquel laboratorio científico, y manos invisibles, arrancaron de la misma las más extrañas sinfonías.

Todo, absolutamente todo quedó registrado. Se grabaron también moldes en yeso, en harina, etc., de manos, de rostros y..., nada más. Es decir, todos los sistemas de control que se usaron, todos los métodos dieron espléndido resultado. Jamás hubo una falla en los experimentos.

Eusapia Palladino fue totalmente controlada, ni siquiera se le permitió regresar a su casa. Hubo de quedarse dentro del Instituto donde funcionaba el laboratorio, controlada por los incrédulos científicos. Se le vigilaba cada paso, se le espiaba cuando no estaba en la sesión científica.

Así fue, mis queridos amigos, como vino a ser demostrada la realidad de una vida más allá de la muerte. Habrá quienes nieguen (nunca faltan los necios), pero yo creo que después de experimentos como los que se hicieron con Eusapia Palladino de Nápoles, ya no debería existir incredulidad sobre la faz de la Tierra.

¿Y qué diremos de los experimentos hechos en Hydesville, con las SEÑORITAS FOX? Bien sabido es que a principios de este siglo, en la casa de aquellas damas se sucedían acontecimientos insólitos: muchas piedras entraban por una ventana y salían por la otra, violando toda ley física; las sillas levitaban en la atmósfera, las mesas, etc...

Al fin, el gran físico WILLIAM CROOKES (aquel hombre que descubriera la Materia Radiante y que la presentara ante los científicos de todo el planeta Tierra), resolvió hacer investigaciones por su cuenta. Invitó para ello, a los mejores físicos de toda Europa. Y como en el caso de Eusapia Palladino, vinieron gentes de todas las metrópolis del Viejo Mundo con el propósito también, como en el caso de Palladino, “de desenmascarar el fraude”.

A las señoritas Fox, dentro de el laboratorio de Ciencias Físicas, se les encerró en una cámara especial; se les ató con cadenas, se las envolvió con alambres eléctricos, se les atravesó los agujeros de los oídos con alambres. Cualquier movimiento que intentaran hacer, como en el caso Eusapia Palladino, de inmediato, era más que suficiente como para que sonara un timbre.

A los pocos instantes de estar allí William Crookes con los suyos y las señoritas Fox (un par de hermanas, atadas en esta forma), entonces se materializó en el laboratorio KATIE KING (una mujer que hacía mucho tiempo había muerto, joven, muy hermosa).

Permaneció materializada en el laboratorio durante tres años; se dejó analizar cuidadosamente, se dejó fotografiar, se dejó someter a peso etc., y el resultado fue formidable. Vino a quedar así completamente comprobada su realidad, su identidad.

Durante tres años se dejo someter a las investigaciones más terribles. ¡Tres años!, óiganlo bien, de investigaciones científicas Pasado los tres años en presencia de todos dijo:

– “¡He cumplido con mi misión, me despido de todos! –Les abrazó–. Les he demostrado que hay algo más allá del sepulcro y ustedes lo han comprobado”... Y en presencia de todas las placas fotográficas se fue desintegrando poco a poco, lentamente.

Sin embargo, dejó un bucle de cabello condensado allí, precisamente allí, en el laboratorio, para que los científicos se diesen cuenta de que nunca habían sido víctimas de ninguna alucinación. Ésa es la cruda realidad de los hechos en relación con Katie King.

Y prosiguiendo con estos estudios recordemos nosotros al médium HOME, de París: metía el rostro entre carbones encendidos y no se quemaba; levitaba sentado en una silla. En alguna ocasión la silla con Home, flotando, salió por una ventana de un segundo piso y penetró en la estancia por otra ventana. ¿Cómo explicar esto desde un punto de vista exclusivamente Materialista? No es posible.

En realidad de verdad estamos ante enigmas que la gente común y corriente no conoce. Obviamente hay métodos, sistemas para poder investigar eso que está más allá del Mundo Tridimensional de Euclides.

Recordemos por un momento el fenómeno conocido como “DESDOBLAMIENTO ASTRAL”. La Entidad Psicológica de cada uno de nosotros puede salir del cuerpo físico a voluntad. El experimento es muy sencillo: Se acostarán ustedes en su lecho, en su cama, con la cabeza hacia el Norte y cuando ya se hallen en el estado de transición existente entre Vigilia y el Sueño, entonces, suave-mente, podrán levantarse del lecho y salir de la casa.

El cuerpo físico quedará, incuestionablemente, acostado en la cama; pero el Yo psicológico, fuera del cuerpo físico, podrá viajar a distintos lugares de la Tierra, para ver, oír, tocar y palpar las grandes realidades.

Algunas personas, con este procedimiento, triunfan de inmediato, otros gastan días o meses,

o hasta años para lograrlo. Pero esto que estoy diciendo (levantarse de la cama y salir de la casa) debe traducirse en hechos.

Obviamente, durante el experimento de desdoblamiento del Yo psicológico, debe uno saber que el cuerpo físico no es, en modo alguno, el Yo psicológico. El cuerpo físico es el cuerpo físico. En estos instantes, debe uno comprender que es el Yo psicológico el que se desdobla, el que sale del cuerpo físico.

De todas maneras, el Yo psicológico se escapa del cuerpo físico durante las horas de sueño normal, pero lo hace inconscientemente. Si ustedes ponen atención a ese proceso podrán hacerlo voluntariamente, conscientemente.

Fuera del cuerpo físico, el Yo psicológico desdoblado, podría invocar, por ejemplo, a cualquier pariente desencarnado, es decir, muerto hace mucho tiempo atrás, entonces lo vería y hasta podría platicar con él. Fuera del cuerpo físico, los Profetas antiguos invocaban a los Ángeles, lograban comunicarse con los mismos, y recibían de ellos conocimientos, Sabiduría...

Así que, en realidad de verdad, fuera del cuerpo físico podemos entrar en contacto con Seres Inefables. Cuando uno aprende a salir del cuerpo físico, puede verificar también que los Dioses Antiguos como el TLÁLOC de Anáhuac, o como el EHECATL (Dios del Viento), o como el HUEHUETEOTL, etc., de la Antropología Gnóstica, no son meros ídolos como creyeron los españoles. En realidad de verdad, estás Deidades son los Elohim o Ángeles Creadores Inefables.

Quien logre el Desdoblamiento de la Personalidad humana podrá, en realidad de verdad, ver a esos Deidusos y platicar con ellos directamente...

Mucho se ha hablado sobre el Desdoblamiento; muchos libros se han escrito sobre el particular. Yo me limito, exclusivamente, a sintetizarles a ustedes. Otro sistema fácil para el Desdoblamiento, consistiría en aprovechar el instante aquél en que uno despierta del sueño normal. Entonces, imaginando un lugar conocido, unir la Voluntad a la Imaginación en vibrante armonía; y luego, llenos de fe, convirtiendo lo imaginado en algo demasiado concreto, echar a caminar por ese lugar. Se produciría el Desdoblamiento, el cuerpo físico quedaría en la cama, dormido. Pero el experimentador andaría con fuera del cuerpo conscientemente.

Posteriormente, se dirigiría a cualquier lugar, ya para investigar las maravillas de la Naturaleza y del Cosmos; ya para viajar a otros planetas del Sistema Solar; ya para moverse entre toda la Galaxia; ya para llegar al Sol Central Sirio, etc. Fuera del cuerpo físico podemos conocer, en verdad, los Misterios de la Vida y de la Muerte.

Hay muchas creencias en el mundo, y cada cual es libre de creer lo que quiera; podríamos creer, por ejemplo, que el Sol existe, o podríamos decir que no existe. Pero el Sol, en modo alguno sería aceptado por nuestras creencias. Si creemos que el Sol existe, está bien; si creemos que no existe, está bien. El no se afecta en modo alguno con nuestras creencias.

Cada cual es libre para lanzar las hipótesis que quiera, o para pensar como quiera, o para creer en lo que quiera. Pero, en realidad de verdad, resulta muy interesante experimentar en forma directa con la PARAPSICOLOGÍA. Ésta nos ofrece un terreno extraordinario para las investigaciones...

Aún más, digo, es posible conocer los Misterios de la Vida y de la Muerte hasta con el mismísimo cuerpo físico. En tiempos antiguos, hubo personas que aprendieron a meter el cuerpo físico dentro de la CUARTA COORDENADA, dentro de la Cuarta Vertical.

Esto es posible. Téngase en cuenta (como dijera Yogananda), que la Mente está relacionada con el cerebro en determinada forma. Mas si nosotros alteramos, por un momento, la relación Mente-Materia, entonces, sí que es posible realizar ciertos experimentos notables, puede el cuerpo físico, en determinadas circunstancias, sumergirse dentro la Cuarta Vertical.

El procedimiento o técnica es la siguiente: Se acuesta uno con la cabeza hacia al Norte; el cuerpo debe estar bien relajado; la cabeza apoyada sobre la palma de la mano izquierda. La figura del cuerpo debe colocarse en forma de “león”, es decir, como cuando un león está echado y durmiendo.

El candidato (de acuerdo con las instrucciones de la antigua Grecia de los Sabios), se concentraría intensamente en un Deiduso griego llamado “HARPOCRATES”, Har-pó-cra-tes... Harpócrates... Él maneja las FUERZAS JINAS, que son una variante de las FUERZAS CRÍSTICAS.

El candidato, vigilaría muy bien su sueño. Y cuando comenzase a sentir cierta lasitud en su cuerpo, haría un esfuerzo tremendo, y con cuerpo físico y todo podría levantarse; y si así lo hiciera, penetraría en la Cuarta Vertical.

En esos instantes, el cuerpo parece como “hincharse” o “inflarse” desde los tobillos hasta el cerebro, poco a poco, y penetra en la Cuarta Dimensión.

Ya sumergido el cuerpo dentro de la Cuarta Dimensión, podemos salir de casa, podemos viajar por el Hiperespacio (el cual está demostrado con la Hipergeometría), y estudiar todos los fenómenos científicos de la Naturaleza.

Fuera de la cama, con el cuerpo en ESTADO DE JINAS, sumergido dentro de la Cuarta Vertical, podemos verificar, por sí mismos, los Misterios de la Vida y de la Muerte.

Negar hechos, burlarnos de eso, ridiculizarlo es completamente fácil. Cualquiera de ustedes puede reírse de lo que aquí estamos diciendo, pero no olvide que “el que ríe de lo que desconoce está en el camino de ser idiota”...

Cualquiera de ustedes podría decir: “¡No creo!” Eso es muy fácil, no creer es facilísimo. Investigar es distinto. Se requiere para la investigación, experimentar, se requiere esfuerzo. Si uno no hace el esfuerzo no puede investigar.

Incuestionablemente, estamos hablando de cosas que, en realidad de verdad, no tienen aceptación pública en los últimos tiempos, pero susceptibles de verificación. Nosotros somos prácticos en un ciento por ciento. Yo los invito a ustedes a la EXPERIMENTACIÓN PRÁCTICA...

De nada serviría que dijéramos: “Eso no sirve, eso es superchería, ésas son supersticiones”; con eso no se resuelve nada. Pero si se investiga, se puede entonces verificar la realidad de lo que estamos afirmando. En Ciencia antigua a esto se le denomina “CIENCIA JINAS”. (La palabra Jinas se escribe con “J”).

Recordemos nosotros, pues, muchos pasajes de los Libros Sagrados y veremos la Ciencia Jinas por doquiera...

En nombre de la verdad debo decir que ha llegado la hora de salir de la mera creencia y entrar en el terreno de la investigación científica. Vale la pena que nosotros hagamos experimentos con nosotros mismos para saber algo... En realidad de verdad, sólo así llegaremos a la Verdad, por el camino de la experimentación directa.

Quienes hemos investigado en este terreno los Misterios de la Vida y de la Muerte, hemos también podido verificar muchas cuestiones relativas a lo mismo.

En instantes en que platico con ustedes sobre estas cuestiones, en instante en que dialogo con ustedes sobre estas inquietudes íntimas, me viene a la memoria un caso de mi adolescencia: Era yo un muchacho todavía, de unos 17 ó 18 años. Tenía una novia en la ciudad capital (ella era capitalina, dijéramos). Y sucedió que, en verdad, no me sentía muy enamorado de ella, y por lo tanto, resolví alejarme definitivamente de la misma.

Viaje por esos días, hacia Veracruz. Una señora anciana, muy respetable, me dio hospitalidad (pues, en verdad, que no tenía mucho dinero que se dijera)...

Puso una cama en una sala que daba, pues, para la calle (calles arenosas de la costa). También me dio un pabellón que me pudiera proteger de los mosquitos y zancudos. Cerró la puerta que conducía al interior de aquella sala y cerró también la puerta que conducía a la calle...

Me acosté a dormir en aquel catre de lona; me preparaba ya, tranquilamente, para el sueño. Aún no estaba dormido, cuando de pronto, alguien tocó en la puerta de la calle con tres golpes acompasados y firmes. Me senté o iba a sentarme, precisamente para salir abrir la puerta.

Pero en instantes en que lo intentaba, un par de manos, atravesando el pabellón se dirigieron a mi rostro. Posteriormente, apareció todo el cuerpo de una mujer que lloraba. La observé detenidamente, y pude evidenciar que era la mismísima novia aquélla que ya no me interesaba. Y llorando me dijo:

– ¿Por qué te fuiste sin despedirte? ¿No sabes lo que yo estoy sufriendo? ¡Te amo!

Bueno, lloraba, y lloraba, y lloraba terriblemente; me acariciaba con sus manos. Quise hablar, pero, en nombre de la verdad, debo decirles a ustedes que sentí un gran terror (estaba muy muchacho y me faltaba estudiar más estas cosas), y claro, se me trabó la lengua; lo que quería decir no lo pude decir. ¿Cómo lo iba a decir si tenía la lengua trabada? El terror era pavoroso...

Pero se me ocurrió que diciéndole mentalmente que se fuera, lograría que en verdad se retirara aquel extraño fantasma. Y mentalmente le dije:

¡Retírese, fuera de aquí, largo!

Yo me voy, ingrato, y me voy, y me voy...

¡Sí, vete cuanto antes!

Se fue. Pero cuando ya iba ella llegando a la puerta, dispuesta a salir de aquella pequeña sala, me asalta un pensamiento atrevido, dije: “Éste es el momento para saber qué hay de cierto en estas cosas de fantasmas. De una vez voy a salir de la duda”.

Tan sólo con pensar así, claro, me llené de valor y al llenarme de valor se destrabó la lengua. Entonces le dije a la mujer:

No se vaya, regrésese muchachita... Y se me va acercando otra vez. Y al fin se regresó...

Póngase más cerca de mí, no me tema nenita.

Bueno, se acercó demasiado, peligrosamente [risas]. Le tomé el pulso para ver si tenía, pues, el sístole y el diástole, pues quería saber si los fantasmas tienen pulso. Y realmente que me asombre al ver que sí; tenía aquel pulso del corazón tranquilo. Le toque la región del hígado a ver si eso tenía hígado; verdad que aunque parecía de... ...esa mujer, tenía hígado. Le toque la región del bazo. ¡Tenía bazo! Alcé mi oído al centro del corazón, a ver si le palpitaba algo por ahí, y sí, le sentí el “relojito” ése, que estaba funcionando.

Claro, para mí fue eso más que suficiente. En verdad que esto de los fantasmas sí tiene realidad. Mas antes de examinarla, me examiné a mí mismo, examiné mis propios sentidos a ver qué tal estaba. Y en verdad que yo no estaba borracho, ni estaba loco ni nada por estilo. Mis ojos estaban funcionando correctamente; el foco de aquel cuarto, encendido; no tenía ninguna pesadilla, puesto que no me había dado ningún banquete antes de acostarme.

Así pues, estaba yo normal, en mis cinco cabales, listo como para hacer algún experimento. Entonces, después de que me examiné a mí mismo, fue que la examiné a ella, y comprobé que, en realidad de verdad, que aquel fantasma era un hecho.

Convencido ya, seguro de que no había caído en ninguna alucinación, le dije:

Bueno, ahora sí puede usted retirarse; estoy satisfecho con las investigaciones. –Respondió:

Bueno, me voy, ingrato; algún día me la pagarás...

No, no, no conteste tanto muchachita; ¡vete, vete, pero vete! Y se fue.

Anoté día, hora, minuto, segundo del experimento. A los pocos instantes alguien golpea (ya no en la calle, sino en el interior de aquella casa). Abro... [Y veo a] la anciana dueña de la casa. Venía con el rostro iracundo...

– ¡Jovencito!, me dijo, yo le he dado aquí a usted posada, porque creí que era un joven bien, un joven decente; yo no lo he autorizado aquí para que me venga a meter mujeres.

¡Válgame Dios, señora! –le dije–, yo no le he metido aquí ninguna mujer.

¡Sí, ¿y la que estaba hablando? ¿Está creyendo que yo estoy sorda?

– No señora; yo no he metido a ninguna mujer; se lo juro que no he metido ninguna mujer en esta casa. Yo sé respetar.

Y entonces, ¿quién era ésa que estaba hablando?

Bueno, señora, no se enoje. Si usted me da la oportunidad de hablar, yo le voy a explicar...

Bueno, a ver, ¿qué es lo que va a decir?

S í señora, le voy a contar lo ocurrido...

Y le conté todo el relato. Conforme iba hablando, si noté que la pobre anciana iba dejando a un lado la ira. Avanzó unos pocos pasos y se metió ya dentro de aquel cuarto, y dijo:

– Esto está frío, esto está helado. ¡Válgame Dios! Verdad que parece que aquí hubiera llegado algún muerto.

– ¡No señora, fue una muerta!...

La pobre anciana persignándose cincuenta mil veces y rezando letanías, se retiró a su cuarto.

Unos dos meses después, volví a verme con aquella susodicha doncella. La saludé, no tanto porque estuviese enamorado de ella, sino porque quería comprobar la cuestión. Le hablé del asunto y me dijo que “en ese día, mes y hora”, que yo le citaba, ciertamente, ella se había acostado a dormir pensando en mí, y que había soñado conmigo; que me había visto en una ciudad de tierra caliente dentro de un pequeño cuarto que daba para la calle”. Eso era lo único que ella recordaba.

“¡Ah!, dije, aquí está el nudo Gordiano de la cuestión. Lo que sucede fue que esta mujer se acostó pensando en mí y se desdobló, fue a dar a donde yo estaba, y tenía tantas ganas de verme la infeliz que, en realidad de verdad, hasta se materializó, físicamente”.

Afortunadamente se volvió a su hogar, y yo pasé aquel experimento con muy buen éxito. Bueno, sobre esta ciencia hay detalles que uno ha visto, detalles que uno ha comprobado, detalles que son realidad; y me propuse realizar, por mí mismo, el experimento del desdoblamiento y logré realizarlo con muy buen éxito. De manera que, para mí, el Desdoblamiento es un hecho.

Como ustedes están viendo, esta no es cuestión simplemente de creencias, sino de experimentar. Es bueno realizar uno experimentos de esta clase, para saber qué es lo tienen de verdad.

He podido verificar muchos asuntos importantes. Por ejemplo, la susodicha dama murió cuatro meses después. Hallábame acostado, muy tranquilo en mi cama, cuando de pronto entró nuevamente la dama, y ya había muerto, y sin embargo entró ahí (bien enamorada que estaba la condenada)... [Risas].

Entró, sí señor, y de una vez se metió en mi cama. ¡Qué alegre que venía!, pero la sentí tan helada que hasta se me quiso trabar la lengua otra vez (eso olía a pura sepultura). La cosa ya estaba grave, francamente grave. Y tuve que apelar a la “letanía mayor” para que se me fuera.

¿Ustedes saben qué es la “letanía mayor”? Pues, le dije un poco de palabras de grueso calibre, claro [risas]. Conclusión: Se fue. Desde entonces no me volvió atormentar la existencia. ¡Que Dios la tenga por allá, donde quiera, pero que no vuelva por estos lados! [Risas]...

Así, experimentos es lo que hay que hacer, mis queridos amigos, ex-pe-ri-men-tos. En realidad de verdad, que a mí me parece que LA MUERTE es una resta de quebrados, una operación matemática. Hecha la resta, ¡qué es lo que continúa? LOS VALORES (y éstos son de tipo energético, indestructibles y continúan).

Obviamente que el Ego o el Yo es una suma de Valores y tales Valores continúan después de la muerte. Esos Valores continúan, ¿dónde? En el ESPACIO PSICOLÓGICO, y se atraen y se repelen de acuerdo con la Ley de la Imantación Universal.

Que tales Valores puedan más tarde reconstruir nuevas células con sus percepciones y sensaciones, es algo que también ya está demostrado.

Por ejemplo, se han hecho experimentos con HIPNOLOGÍA: A un sujeto sensitivo, por ejemplo, se le sometió a un Sueño Hipnótico profundo. Logró a recordar la totalidad de su presente existencia; llegó a recordar hasta los más mínimos detalles de su tierna infancia. Durante el Estado de Hipnosis pudo recordar hasta el momento de nacer.

Se continúo con el experimento. El sujeto penetró en el Estado de Catalepsia (que es un estado muy profundo de la Hipnosis y puede ser bastante peligroso. Eso lo saben los estudiantes de la Universidad de Medellín).

Logró, aquel sujeto, dar detalles de una pasada existencia. Habló en otro idioma con entera naturalidad. Dijo haber vivido en Estados Unidos. Y él, que no hablaba jamás en su vida inglés, resultó hablando inglés correctamente.

Hizo narraciones plenas, completas sobre su pasada existencia en los Estados Unidos. Una vez que ya dio testimonio de su propia vida, una vez que ya pudo narrar una pasada existencia (en la que había vivido en los Estados Unidos), empezó a narrar la vida tras anterior.

Narró entonces en otro idioma (recuerdo que me dijeron, en francés). Y pudo rememorar toda esa otra existencia. Y así, con ese procedimiento, citó una serie de existencias que había tenido en tiempos antiguos. Y habló en otros idiomas...

Este fue un hecho asombroso. Y constantemente, los apasionados con la Hipnología suelen hacer este tipo de experimentos. Esto nos invita a pensar que la cuestión esa de las vidas sucesivas, es un hecho.

De manera que los Valores, después de la muerte reconstruyen nuevas células con sus percepciones y sensaciones. Es decir, se reencarnifican, o mejor dicho, RETORNAN, regresan, se reincorporan; y esto está comprobado...

Ahora, si yo les dijese lo que hacen los estudiantes de Hipnología con experimentos de esta clase, pero no diese algún testimonio vivido por mí, podrían ustedes decir: “Bueno, este hombre ha leído eso en alguna parte y aquí viene y nos lo cuenta”. Pero en verdad que les digo que yo también he hecho experimentos conmigo mismo, y en verdad que he logrado recordar otras existencias. Inclusive, he podido recordar hasta nombres y apellidos. Esto es interesantísimo de por sí.

Yo, en mi pasada existencia, por ejemplo, me llamé DANIEL CORONADO. Estuve en la Revolución con Pancho Villa; anduve en la “División del Norte”, etc.; sería largo de narrar toda aquella existencia. Pero, en realidad de verdad, la recuerdo con todos los puntos y señales. Y así como recuerdo esa pasada vida con tanta naturalidad, he podido también recordar todas mis pasadas existencias.

De manera que, para mí, la LEY DEL ETERNO RETORNO DE TODAS LAS COSAS es un hecho. Los planetas giran alrededor del Sol, van y vienen, siempre retornan; las estaciones de Primavera, Verano, Otoño e Invierno, retornan cada año; todo retorna... Retornan los átomos al punto inicial de partida en su viaje alrededor del centro atómico de la molécula... No hay nada que no retorne...

¿Por qué no habrían de retornar los Valores Energéticos de la persona humana? Es posible. Y ya hay muchos estudios en ese sentido.

Ahora bien, no solamente yo recuerdo mis vidas anteriores. Hay muchas gentes que las recuerdan. En realidad de verdad que la Ley del Eterno Retorno de todas las cosas, para unos, será una teoría más; para otros, una utopía; para aquéllos una necedad; para los otros, una creencia o una superstición, o una carcajada, o un sarcasmo, o una payasada y nada más... Pero para aquellos que re-cor-da-mos nuestras existencias pasadas, la Ley del Eterno Retorno de todas las cosas, es un hecho.

Así pues, mis queridos amigos, hablo de lo que me consta. Creo que es un deber compartir con mis semejantes lo que he experimentado. Otros investigadores también comparten con sus amistades, sus experimentos. Entiendo que todo hombre que descubra algo, pues, debe compartirlo con sus semejantes; y si estos se burlan, y si estos ríen, si estos no aceptan sus conceptos, no importa. Lo importante es que debemos compartir lo que descubrimos con nuestros semejantes. Porque todos nosotros somos una gran familia.

Sería lamentable, por ejemplo, que algunos de ustedes descubriera algo interesante y que no lo compartiera con nosotros. Si alguno de ustedes descubre algo importante y se presenta en este salón para dictar una conferencia, incuestionablemente, yo seré el primero en asistir a la conferencia como oyente, con el propósito de aprender lo que no sé. Así también, creo que ustedes conceptuaran, porque cada cual, digo, es muy libre de pensar como quiera.

Continuando con estás disquisiciones, llegamos a la conclusión lógica de que después de la muerte “algo” continúa, “algo”, ¿qué será? Ya lo dijimos: los Valores.

Tres cosas van al sepulcro, y de eso no tenemos la menor duda:

1ª) EL CUERPO FÍSICO. Éste se va descomponiendo poco a poco, lentamente.

2ª) EL CUERPO BIOPLÁSTICO, que como ya dije, ha sido fotografiado y está siendo estudiado, en este momento, por los científicos Rusos. Obviamente, tal vehículo, se descompone lentamente frente a la fosa sepulcral, de acuerdo con las investigaciones científicas que hemos realizado.

3ª) LA EXPERSONALIDAD del muerto. No existe ningún mañana para la Personalidad del muerto. La Personalidad es energética. Se forma durante los siete primeros años de la infancia con el ejemplo de nuestros mayores, y se robustece con el tiempo y las experiencias. A la hora de la muerte, la Personalidad Humana va también al sepulcro.

Investigaciones que se han hecho, nos han podido demostrar que de cuando en cuando, aquella Expersonalidad sale de la fosa sepulcral y deambula por el panteón, mas regresa al sepulcro y se va desintegrando lentamente, hasta convertirse en polvareda cósmica.

Si las personas comunes y corrientes no pueden ver esta Expersonalidad, se debe a que ya el SEXTO SENTIDO, en esas personas, está degenerado por el abuso sexual, no sólo en la presente existencia, sino también en pasadas existencias.

Entonces, hay sistemas... Nosotros tenemos en nuestra institución, métodos científicos que nos permiten el desarrollo del Sexto Sentido. Obviamente, con tal sentido, podremos ver directamente a la Expersonalidad del muerto, en proceso de desintegración atómica y molecular.

No hay duda de que, más tarde, habrán instrumentos aún más perfectos que podrán fotografiar a la Expersonalidad.

Obviamente, no tiene la Expersonalidad ningún porvenir, se vuelve polvo. Pero el EGO continúa, es decir, el Yo psicológico en el espacio psicológico. El Ego no es más que una suma de Valores (Positivos y Negativos). Tales Valores retornan, regresan, se reincorporan y forman un nuevo cuer

po físico. También es cierto y de toda verdad, que durante los primeros siete años volverá a formarse una nueva Personalidad.

Así, mis queridos amigos, todos retornamos, todos regresamos... Unida a Ley del Eterno Retorno de todas las cosas, está la LEY DE RECURRENCIA. Todo vuelve a ocurrir tal como sucedió. La vida es una película; al morir hemos regresado al principio de la película, al punto inicial de partida.

Obviamente, nos llevamos la película para la Dimensión Desconocida. No hay duda que al retornar, traemos la película para volverla a proyectar sobre la pantalla de la existencia; y así repetimos, lamentablemente, la vida anterior, con todas sus consecuencias, tanto positivas como negativas; ésa es la Ley de Recurrencia....

A toda Alma humana se le asignan 108 EXISTENCIAS. Cumplidas las 108 y si nosotros no hemos logrado la Perfección, tendremos que involucionar entre las entrañas de la Tierra hasta la MUERTE SEGUNDA, de la cual nos habla el “Apocalipsis” de San Juan.

Es en el Noveno Círculo Dantesco, donde el Ego se desintegra, se vuelve polvo (ésa es la Muerte Segunda). Mas hay algo que se escapa, me refiero a la ESENCIA ANÍMICA, está surge nuevamente ante la luz del Sol; la Esencia que entra en el Edén; EVOLUCIONA nuevamente en el Reino Mineral; prosigue sus procesos evolutivos en el Vegetal; sigue en el Animal reincorporándose en distintas criaturas, y al fin, vuelve a reconquistar el Estado Humano que otrora perdiera.

Cumplida, entonces al iniciarse un nuevo Ciclo de Existencias, se le entrega al Alma 108 Existencias para que se perfeccione. Si no lo logra, el proceso se repite. Y así, escrito está en los mejores tratados de Cosmogonía, en los mejores libros de la Sabiduría Oriental, que existen 3.000 CICLOS de manifestación para el Alma humana.

Aquellos que no aprovechen esos 3.000 Ciclos, pierden toda oportunidad, y por último, convertidos en simples ELEMENTALES de la Naturaleza, se sumergirán entre el SENO DEL ETERNO PADRE CÓSMICO COMÚN para siempre...

Lo que estoy diciendo, repito, no será aceptado por muchos. Porque para ser aceptado, se necesitaría que todos pudieran ver eso, que lo pudieran tocar, que lo pudieran palpar como podemos tocar aquí esta mesa.

Pero si alguien aprende a salir del cuerpo físico a voluntad y conscientemente, fuera de la forma física podrá investigar esto, verlo, oírlo, tocarlo; y entonces se verá obligado a tener que ratificar lo que aquí ha escuchado, entonces podrá verificar nuestras afirmaciones; de lo contrario no sería posible...

Distinguidos amigos, en realidad de verdad que me siento contento al platicar con ustedes. Obviamente, tienen ustedes una gran cultura, veo personas decentes que han tenido la amabilidad de escuchar mis humildes conceptos. Termino está esta conferencia y les deseo a ustedes muy buenas noches. ¡Paz Inverencial!