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El Quinto Evangelio.- Atributos y Misión de los Extraterrestres

ATRIBUTOS Y MISIÓN DE LOS EXTRATERRESTRES

  Me dirijo a todos ustedes, dentro del “Instituto Tecnológico Regional de Nogales”, con el propósito de compartir con ustedes ciertas inquietudes sobre el Fenómeno OVNI. En realidad, el Fenómeno Ovni es inquietante....

En instantes en que me dirijo a ustedes, me viene a la memoria un caso muy curioso: Cierta tarde, en mi casa, en el Distrito Federal (que es la de ustedes, aquí entre paréntesis), escuché a Jacobo Zabludoski. Este hombre se reía sobre el Fenómeno Ovni, pues ustedes saben que es bastante escéptico en ese sentido; más bien, Pedro Ferriz se ha dedicado seriamente al estudio Fenómeno Ovni.

Terminada la intervención de Jacobo Zabludoski (riéndose y con palabritas escépticas sobre el Fenómeno Ovni), algunos amigos, presurosamente, me invitaron a que saliera a la calle cuanto antes.

Salí, y cuan grande fue mi asombro al ver, precisamente, a un OVNI volando casi, dijéramos, al ras del techo de la casa. Iba tan bajo, volando tan bajo que, todos los de la calle, todos los vecinos se quedaron asombrados; además, iba volando muy despacio. Si hubiera tenido en esos momentos una cámara fotográfica, me habría gustado haberlo fotografiado.

Lo más interesante es que aquellos vecinos se rieron entonces, ya no del Fenómeno Ovni, sino del escepticismo de Jacobo Zabludoski. El hecho aquél había sido contundente; tan contundente que lo que había afirmado antes Zabludoski en relación con el Ovni, quedó ridículo, espantosamente ridículo ante la realidad. Así que, en realidad, el Fenómeno Ovni es bastante inquietante...

En la República de El Salvador acaeció algo demasiado singular: Se dio el caso, por cierto bastante sensacional, de un ingeniero que fuera llevado al Planeta JÚPITER. Aquel ingeniero era escéptico en un ciento por ciento, no creía en estas cosas; y hallándose una noche en un parque de San Salvador, una Nave Cósmica aterrizó cerca de allí.

Algunos tripulantes descendieron de la nave y lo invitaron a entrar. Él, todavía escéptico, penetró en tal nave y a los pocos segundos vio, con asombro, que la Tierra quedaba abajo; y vio como se iba alejando a través del espacio, hasta que la Tierra, al fin, parecía una pequeña moneda en el infinito. Fue llevado este hombre, según afirma, en 30 minutos nada más, al planeta Júpiter.

Asevera, en forma enfática, que en Júpiter encontró una poderosísima civilización. Lo invitaron a quedarse allí, y sin embargo, no quiso. Se limitó a decir que él regresaría al planeta Tierra, para poder contar a los Terrícolas algo de lo que vio; que le gustaría dar testimonio de que sí hay vida en otros mundos habitados.

Encontró allí, en Júpiter, a algunos Terrícolas que habían sido llevados de nuestro mundo, precisamente, para que conocieran a aquel planeta. Ellos no habían querido regresar al mundo Tierra, prefirieron quedarse en Júpiter.

El ingeniero aquél, escéptico, incrédulo y materialista en un ciento por ciento, cambió total-mente: Su materialismo se fue para abajo; ante los hechos tuvo que rendirse y reconocer que la Sabiduría del Universo es infinita. Hoy, ese ingeniero, está dentro de las filas del Movimiento Gnóstico en la República del Salvador.

Se nos ha dicho que piensa escribir un libro para informar sobre todas estas cosas. Ojalá lo escriba pronto, pues, que en verdad, sí nos interesaría conocer toda su exposición...

Prosigamos: Otro caso que me ha parecido bastante interesante sucedió en el Ecuador. Cierto individuo soltero, que estaba afiliado a una Escuela del Mundo Oriental, cualquier día de esos tantos fue visitado por unos Extraterrestres.

La nave descendió, precisamente, en el enorme jardín de su casa. Como quiera que este hombre ya se venía preparando para tal evento, no tuvo miedo. Subió a tal nave y fue llevado al satélite GANIMEDES. Ese satélite gira alrededor del planeta Júpiter. No está demás decirles a ustedes que doce satélites, en general, giran alrededor del citado astro.

Júpiter es un titán, un mundo bastante gigantesco. Yo muchas veces lo he observado, lo he visto a través del telescopio. No hay duda que nos tiene bastante intrigados ese doble cinturón en la Zona Ecuatorial. Me parece que los hombres de ciencia no han investigado tal cinturón...

En cuanto a mí se refiere, francamente me tiene intrigado y me propongo hacer una investigación más a fondo. Es lástima que nuestros telescopios actuales no tengan, en realidad de verdad, el alcance que nosotros necesitamos. Sin embargo, el del Monte Palomar, es mejor...

Pero, bueno, continuemos con esta cuestión. Aquel hombre, repito, estuvo en el satélite de Júpiter llamado Ganimedes. ¿Qué vio en Ganimedes? Una poderosa civilización: Las casas son construidas bajo tierra con un material suave pero firme y de una sola pieza. El agua tienen que extraerla de ciertos volcanes. Poseen terrenos debidamente sembrados, cultivan ellos mismos sus alimentos.

En cuestiones culturales –se nos informó–, tienen magníficas Universidades. Causa verdadera sensación conocer el modo de estudiar de los habitantes de Ganimedes. Como quiera que poseen un Sexto Sentido, obviamente, pueden explorar mejor el ASIENTO VITAL del cuerpo físico. No solamente conocen los procesos biológicos, catalíticos, etc., sino que además conocen el Fondo Vital.

Los científicos de nuestro mundo Tierra, han estudiado la mecánica de la célula viva, pero, ¿qué saben sobre el Fondo Vital? ¡Absolutamente nada!

Aquí, nosotros los Mexicanos, tuvimos un gran sabio. Me refiero a Don Alfonso Herrera, el autor de la Teoría de la Plasmogenia. Este hombre logró crear la célula artificial (una célula muy bien hecha), pero esa célula nunca tuvo vida. ¿Por qué? Porque Don Alfonso no pudo nunca manipular el Fondo Vital.

Podríamos crear en el laboratorio un zoospermo masculino artificial; podríamos también crear un óvulo femenino artificial (se conocen las fórmulas bioquímicas); no veo porque no se podría crear. Pero una cosa es cierta: Que de tales gametos artificiales, no podríamos nosotros conseguir una nueva criatura. ¿Por qué? Porque no manejamos el Fondo Vital.

Se hacen inseminaciones artificiales (tanto en animales como en las personas), pero tales inseminaciones se fundamentan en lo que la Naturaleza ya ha hecho. Se tienen, por ejemplo, zoospermos, o sea, materia espermática, se puede hacer la inseminación y eso es claro, da como resultado que aparece una nueva criatura.

Pero el científico no ha hecho los zoospermo, los ha hecho la Naturaleza, han sido extraídos de organismo vivos. Entonces, estamos jugando con lo que la Naturaleza ha hecho, pero nosotros no somos capaces de hacer.

Hay un Fondo Vital en la célula viva, una especie de DOBLE ORGANISMO que (como decía anoche en una conferencia), ha recibido en Rusia, precisamente, el nombre de CUERPO BIOPLÁSTICO. Se le ha fotografiado y se le tiene actualmente en observación...

Sucede que en Ganimedes, el Fondo Vital es conocido desde hace muchos siglos. Los habitantes de Ganimedes no necesitan de aparatos especiales para ver el Fondo Vital. Ellos poseen un Sexto Sentido: La Glándula Pineal, por ejemplo, de los habitantes de Ganimedes es de mayor volumen que la de los Terrícolas. Bien sabemos que la Glándula Pineal de los Terrícolas mide tan sólo cinco milímetros de diámetro y está rodeada de una fina arenilla. La Glándula Pineal de los habitantes de Ganimedes es más voluminosa.

No hay duda de que esa glándula, por ejemplo, en los tiempos antiguos, aquí, en el planeta Tierra, también estuvo desarrollada y permitió a los Lemures ver siempre el Ultra de todas las cosas, no solamente el Mundo Tridimensional de Euclides, sino también la Cuarta Coordenada matemática.

Los habitantes de Ganimedes no han perdido todavía la Percepción Psíquica; la Glándula Pineal de ellos, digo, es más voluminosa. Tal glándula se haya conectada, en ellos, a la Glándula Pituitaria, por medio de ciertas ramos nerviosos; y a su vez, la Pituitaria está conectada al Centro Cerebral de Sensaciones y a todo el Nervio Optico en general, por ramos muy finos, nerviosos.

Poseen, pues, los habitantes de Ganimedes, un tipo de VISIÓN SUPERIOR: Pueden ver el Fondo Vital de cualquier criatura viviente, el Ultra de todas las cosas, y por ende, para ellos, los famosos Misterios de la Vida y de la Muerte son perceptibles a simple vista; no necesitan de microscopio especiales, ni de ultramicroscopios para conocer el origen de la vida.

Conoció este hombre todo eso, en Ganimedes; conoció también las Naves Cósmicas que los habitantes de ese mundo utilizan para viajar a través del espacio infinito.

Son grandes matemáticos; utilizan la energía solar no solamente para propulsar sus naves, sino también para todos sus servicios ordinarios. Incuestionablemente, las lámparas con que se iluminan hasta en sus mismísimos hogares, son a base de energía solar.

De acuerdo con los relatos de este hombre supimos que los habitantes de Ganimedes vinieron originalmente de un mundo que existía también en nuestro Sistema Solar, y que ellos llamaron, el PLANETA AMARILLO.

Sucedió que los habitantes del Planeta Amarillo se dedicaron de lleno a hacer experimento atómicos (algo similar a lo que está sucediendo en nuestro Planeta Tierra, por estos instantes). Un hombre muy Sabio advirtió a los habitantes del Planeta Amarillo, la posibilidad que mediante tales experimentos se llegara a destruir aquel mundo.

Los habitantes, en general, no le creyeron –como siempre–, pero hubo una minoría que sí le creyó. Los de la vanguardia, los que sí aceptaron esa tesis, como quiera que poseían Naves Cósmicas se propusieron investigar al satélite Ganimedes. Vieron que había allí todavía vida y que giraba alrededor de Júpiter, y se transportaron a ese lugar.

Cuando en verdad se provocó una gran explosión que hizo saltar en pedazos el Planeta Amarillo, ya los de la vanguardia estaban establecidos en Ganimedes...

Esto que yo estoy hablando, en estos momentos, tiene comprobación. Los astrónomos han podido ver, desde el observatorio, enormes pedazos de lo que fue el Planeta Amarillo. Así que se trata de hechos concretos claros y definitivos.

Estuvo cerca de un mes, este hombre, viviendo en Ganimedes. En tanto, un hermano que tenía y que siempre le visitaba con su esposa, tocó la puerta; y grande fue su asombro al ver que no salía el hombre abrir; siguió tocando, y al fin, salió el criado.

Interrogaron al criado:

– ¿Dónde estaba su amo? El criado dijo:

– Aunque parezca increíble, es cierto: Aterrizó en el jardín de esta casa una Nave Cósmica y el señor subió a la nave y se fue.

¿Para dónde?

No sabría decirlo. Pero eso sucedió aunque ustedes crean que yo estoy loco..

Es natural que esto alarmó bastante a su hermano. Pero, ya el hombre había rogado a los habitantes de Ganimedes que le permitieran regresar a la Tierra, para despedirse de su hermano y de su cuñada, y legarle su casa y también su automóvil.

Los habitantes de Ganimedes aceptaron y lo trajeron de regreso a la Tierra, quedando de volver, por él, un mes después. Claro está, que el caballero en mención fue a buscar a su hermano y a la esposa del mismo, le habló con toda franqueza de lo que había sucedido; le escrituró su casa, les regaló el automóvil, los dineros que poseía en el banco, etc.

Un mes después, invitaba nuevamente a su hermano y a su cuñada para una cena que, según dijo, iba a ser de despedida, porque quería viajar. En medio de la cena, estando todos muy contentos, una nave llena de bellísimas luces descendió lentamente sobre el césped, en el jardín maravilloso de su hermosa residencia.

Me voy –dijo–.

¡Ah, nosotros ya lo presentíamos!... –Exclamó su cuñada–.

Sí, me voy, pero por mi voluntad. No es que me lleven a mí secuestrado. –Y subió a la nave–.

Sin embargo, dejó a su hermano una especie de pantalla de televisión pequeña, cargada con batería solar. Dijo:

– Bastaría que te concentres en un aparato receptor que hay aquí, dentro de este instrumento, para que logres conectarte con nosotros. –La nave partió al espacio infinito–...

Su hermano, con ese aparato, siguió comunicándose con Ganimedes. Siempre contestaron los habitantes de Ganimedes. Y él y la esposa de él, se prepararon pacientemente mediante un SISTEMA PSICOLÓGICO ESPECIAL, a fin de ser también llevados algún día a Ganimedes, y se cumplió. Llegó el día en que también fueron llevados...

Pero, ¿cómo hizo el hombre de nuestra narración, para poder entablar contacto directo con los habitantes de Ganimedes? Nosotros estuvimos inquiriendo, investigando, y llegamos a la conclusión de que este hombre se concentraba diariamente en tal planeta, en tal satélite hasta que al fin, tuvo la respuesta...

Si a ustedes llegara a interesarle esta cuestión del Misterio Ovni, si ustedes se dedicaran diariamente a CONCENTRARSE EN GANIMEDES, llevando una CONDUCTA RECTA diariamente, podrían obtener, después de cierto tiempo, la respuesta.

En Ganimedes, los habitantes de aquel satélite tienen una especie de receptores especiales que captan las ondas mentales y las analizan. Cuando se dan cuenta de que quien las emite lo hace sinceramente y no simplemente por diversión o curiosidad, se interesan por él, y tarde o temprano le visitan.

Así que les doy una clave maravillosa y práctica para entrar en contacto directo con Ganimedes. No olviden que la Fuerza Mental existe, ya ha podido ser medida en forma de microvoltios. Estos tipos de ondas se han visto que salen de neopadium del cerebro. No hay duda de que son muy veloces y viajan a través del espacio. Si las dirigimos hacia Ganimedes, podríamos obtener una respuesta favorable.

Mucho se ha hablado sobre el Fenómeno Ovni y yo podría relatarle muchas experiencias, sin embargo, debo también relatar mis propias experiencias. Yo tuve contacto directo con Viajeros Intergalácticos, voy a relatarles el caso...

Hallábame en el DESIERTO DE LOS LEONES, Distrito Federal; de pronto, vi una nave que lentamente descendió en un claro del bosque. Movido por la curiosidad, me acerqué al lugar. Grande fue mi asombro (pues, entre paréntesis, no he perdido todavía la capacidad de asombro), al ver una nave esférica completamente y algo achatada, sostenida sobre un trípode de acero. Comprendí de qué se trataba...

Se abrió una escotilla y un hombre de mediana estatura, delgado, piel cobriza, ojos azules, amplia frente (que traía en su mano derecha un aparato desconocido para mí), descendió por una escalinata de metal también.

Tras de él venían otras tantas personas, la tripulación digo, siguiéndole. Es claro que me acerqué y le hablé, y me entendió. Pues, me asombró que al decirles:

– Buenos días, señor... –Me contestaron también en correcto español–.

– Buenos días. Aquello fue más que asombroso, me dije: “¿Es posible que los navegantes del espacio conozcan los idiomas de la Tierra?” Me asombró...

En esos instantes sentí el anhelo de conocer otros mundos del espacio y hasta me agarré al trípode metálico sobre el que se sostenía la nave, y dije al capitán:

Quisiera que usted me llevara al planeta Marte.

¿Cómo dice usted, a Marte?

Sí señor, a Marte...

– Ah, eso es allí no más –me dijo–. Es decir, Marte, para él, quedaba demasiado cerca, era tanto como ir a la tienda de la esquina. Me quedé nuevamente asombrado.

El capitán se citó a su gente y se dirigió hacia un lugar donde estaba unos troncos de árboles tendidos horizontalmente en el piso... Volví a rogarle, le dije:

– Señor, soy escritor; me gustaría conocer otras civilizaciones del Cosmos para informar sobre esto a los habitantes de la Tierra. Me gustaría además traer pruebas (sean organismos vivos, o plantas, o máquinas o libros o lo que fuere), para convencer a los terrícolas; porque señor –le dije–, aquí, en nuestro mundo, los Terrícolas son escépticos en un ciento por ciento. No me creerían a mí nada de eso, si no les trajeran pruebas; y no me lo creerían ni hincado, ni aún si llorara con lágrimas de sangre...

El capitán guardaba silencio. Se sentaron los de la tripulación sobre troncos de madera. Una vez que todos estuvieron sentados, sucedió que una de las damas (pues, venían dos damas entre ellos), de edad indescifrable, se puso de pie y dijo:

– Si nosotros tomamos una planta que no es aromática y la colocamos junto a otra que sí lo es, es obvio que la que no es aromática se impregnará con el aroma de la que sí lo es, ¿verdad?

– Es claro –respondí–.

– Pues, bien, lo mismo que sucede en los mundos: Mundos con humanidades que antes andaba muy mal, se fueron impregnados, poco a poco, con las radiaciones de los mundos vecinos y ahora andan muy bien; mas hemos acabado de llegar, aquí, al planeta Tierra, como usted ha visto, y con asombro vemos que aquí no sucede lo mismo. ¿Qué es lo que está pasando en este planeta Tierra?

La pregunta fue tremenda, reflexionando un poco le respondí:

– Bueno, ésta es una equivocación de los Dioses... Pero luego quise redondear un poquito mejor mi concepto y proseguí diciendo:

– Así es el karma de los Mundos. La dama asintió con una venia. La otra dama, también inclinó respetuosamente su cabeza en señal de aceptación del concento; y todos los de la tripulación hicieron lo mismo.

Después, se pusieron de pie dispuestos a retirarse. Y volví yo (nuevamente con mi terquedad), a suplicarles por favor que me llevaran; se lo rogué al capitán, y hasta le supliqué. Mas todo fue inútil; se limitó a decirme:

– En el Camino iremos viendo.

...La respuesta, porque sé que éstos no son Terrícolas y que cumplen su palabra de verdad.

 

...Entendí que debería mejorar todavía mucho...

Y observé el momento en que regresaba, nuevamente, al interior de su nave. Posteriormente, me retiré muy despacio para observar lo que pasaba. Vi el momento en que aquella nave giró sobre su eje y se levantó muy despacio, para desaparecer después velozmente a través del inalterable infinito...

Ahora comprendo, que en realidad de verdad, debe uno preparase psicológicamente para un viaje de esta clase.

Mucho se ha hablado sobre las Naves Cósmicas, unos creen otros no. Afortunadamente, ya la mayoría de los habitantes de la Tierra, aceptó la realidad de los PLATILLOS VOLADORES. Los ingleses oficialmente dieron su comunicado, dijeron:

“No podemos negarlos, existen, pero como quiera que tienen una civilización tan adelantada y nosotros no estamos a su altura, naturalmente no podemos comprenderlos; y como no podemos comprenderlos, preferimos más bien, dedicarnos a nuestra civilización, a la conquista del espacio por nuestros propios esfuerzos, a ver si algún día llegamos”...

Así fue el comunicado oficial de Inglaterra. Hoy en día, negar los Discos Voladores equivale a ser necio. Se ha podido verificar la realidad en forma tan contundente que me parece que ya ningún astrónomo u hombre de ciencia en el planeta Tierra, se atrevería en verdad a negar la existencia de los Discos Voladores. Hoy, negar eso, significa ignorancia...

Mis amigos: Ahora, nos viene a la mente ciertos interrogantes. ¿Con qué objetos nos visitarían los EXTRATERRESTRES? ¿Para qué?

Hay casos que asombran... En el Brasil, por ejemplo, se dio un acontecer que fue bastante extraño: Cierto campesino que estaba trabajando su tierra, fue de pronto tomado por fuertes brazos y conducido al interior de una Nave Cósmica; se le encerró dentro de una recámara después de habérsele examinado en un laboratorio; en tal laboratorio se estudió su sangre, la calidad de su sangre.

Satisfechos aquellos científicos con la calidad de su sangre, le metieron en una recámara donde había una cama; una dama entró posteriormente a la recámara (según afirma aquel campesino, dicha mujer no tenía cejas y sus ojos eran oblicuos como los de los chinos), le sedujo sexual-mente y luego efectuó la cópula con él. Posteriormente, le sacaron de la nave, le dejaron al lugar y la nave partió a través del espacio.

¿Objetivo? ¿Para qué, por qué se le examinó la sangre, por qué se le obligó a tener contacto sexual con esa mujer? ¿Qué pasa en todo eso? Vale la pena que nosotros nos volvamos más reflexivos y tratemos de inquirir, de investigar...

Sabemos que en estos instantes de crisis mundial y de bancarrota de todos los principios, un evento terrible nos amenaza: Quiero referirme ahora a aquel gigantesco planeta que lleva el nombre de “BARNARD I”.

Barnard, el astrónomo que lo estuvo observando y que cree que lo descubrió... Digo que “cree que lo descubrió”, porque ya tal planeta había sido anunciado por NOSTRADAMUS en plena Edad Media. Yo mismo, en muchas de mis obras ya había hablado sobre ese mundo. De manera que el Sr. Barnard, eminente astrónomo, no fue realmente su descubridor, pero sí lo bautizó con ese nombre y así lo denominan ahora los hombres de ciencia.

Viaja tal planeta a velocidades extraordinarias; pertenece a un lejano Sistema Solar. Me refiero en forma enfática, al SISTEMA SOLAR TYLAR.

Tiene una órbita formidable y de acuerdo con los cálculos matemáticos que se han venido realizando en los distintos observatorios del mundo Tierra (tanto en las Filipinas como en Londres, tanto en Londres como en el Palomar, etc.), dicho mundo viene hacia la órbita de la Tierra; es gigantesco: seis veces más grande que Júpiter; miles de veces más grande que el planeta Tierra. Pronto estará cerca tal titán de los cielos...

Como quiera que trae algunos peligros muy graves para el mundo Tierra, los astrónomos se han esmerado en sus MAPAS COSMOLÓGICOS; uno de esos mapas trazados por los observatorios, lo tenemos en nuestra Asociación Gnóstica de Estudios Antropológicos y Culturales, lo tenemos en la casa matriz.

Con tal mapa, hemos podido verificar que el planeta Tierra recibirá los principales efectos del acercamiento de aquel mundo, y secundariamente serán afectados Marte, Urano y Júpiter.

Cuando ya aquel mundo esté muy cerca a nuestra Tierra, como quiera que es una masa gigantesca, atraerá magnéticamente hacia la superficie de la Tierra, al fuego líquido que existe realmente en el interior del mundo. Entonces brotaran volcanes por doquiera, acompañados de terribles maremotos y grandes terremotos...

En instantes en que digo esto, me viene a la memoria lo que dijeron los NAHUAS: “Los Hijos de Quinto Sol (haciendo alusión a nosotros), perecerán por el fuego y por los terremotos”...

Así que lo que ellos dijeron tiene una base muy real: Obviamente, el fuego líquido circulará por la costra terrestre y quemará todo aquello que tenga vida. Así se cumplirá la profecía de los MAYAS para el KATÚN-13; también se cumplirán así las profecías que MAHOMA, en el CORÁN, hace para el Katún-13 (aunque él no diga la palabra “Katún-13”).

En realidad de verdad, los hechos hablarán por sí mismos, y cuando aquel mundo se acerque demasiado a nuestro planeta Tierra, después del Gran Incendio Universal, es obvio que deberá provocarse una REVOLUCIÓN DE LOS EJES DE LA TIERRA: Los Polos se convertirán en Ecuador, el Ecuador en Polos; los mares cambiarán de lecho, y los continentes actuales se sumergirán entre el fondo de las aguas...

Ese será el final de los Hijos del Quinto Sol, como dijeron los Sabios de Anáhuac, cuando presentaron, o cuando hablaron sobre la Piedra Azteca, la Piedra Solar (“El Calendario”, al que me refiero).

Estamos hablando sobre hechos y también estamos analizando profecías de Anáhuac...

Bien, entonces podemos deducir, como consecuencia o corolario, que en estos instantes estamos siendo auxiliados por los Extraterrestres. Más de una catástrofe atómica habría ya sucedido en Estado Unidos o en Rusia, si no hubiesen los Extraterrestres venido en nuestro auxilio.

Mas, ¿cuál es el recibimiento que se le hace a los Extraterrestres? A la vista salta: Hace poco, dos naves volaron sobre territorio de los Estados Unidos, provenientes del espacio estrellado. De inmediato, los aviones de la Fuerza Aérea corrieron a su encuentro armados con cohetes y ametralladoras.

Una de las Naves Cósmicas partió hacia el infinito, la otra descendió suavemente sobre una torre de la energía eléctrica, fue entonces cuando se produjo el APAGÓN DE NUEVA YORK.

Se logró fotografiar a los dos naves (tanto a la que partió para el espacio infinito, como a la que se posó sobre la torre de la energía eléctrica). Con esto, los Extraterrestres, dieron una prueba de su poder.

Los generales de los Estados Unidos de Norteamérica exclamaron: “¡He ahí el talón de Aquiles de los Estados Unidos!”.... Realmente no es posible en modo alguno que Estados Unidos movilice sus defensas si le falla la energía eléctrica.

Si un puñadito de Hombres había paralizado a la poderosa nación norteamericana (tan sólo unos pocos Hombres, fueron necesarios para vencer a los Estados Unidos), ¡cuán poderosos son en verdad los Extraterrestres!...

Ciertamente nosotros, los Terrícolas, estamos demasiado atrasados. Cuando aprendíamos los primeros rudimentos de matemáticas, ya los Extraterrestres habían conquistado el Espacio y viajaban a través del Infinito.

Y sin embargo, somos tan atrevidos que en vez de recibir a esos Señores del Espacio con verdadero amor, con verdadera dignidad, les recibimos a balazos. Esto nos está indicando que somos todavía bárbaros en el sentido más completo de la palabra.

Muchos se dirían: “Bueno y entonces si ellos son tan Sabios y nosotros tan atrasados, ¿por qué no vienen a civilizarnos y aterrizan?... ...O en el Zócalo de México o en cualquier pueblo, ¿por qué corren, por qué se van, por qué se ocultan, qué les pasa?”...

Yo, a mi vez, les preguntaría a ustedes los siguiente: ¿Qué harían ustedes si andando por una selva del África o del Amazonas, se encontraran de pronto con una tribu de caníbales? Huirían, ¿verdad?

No me parece que a ustedes les gustaría que los “rostizaran”, y que después sirvieran para el banquete. Ustedes tratarían de salvar el pellejo a como diera lugar.

Y si llevaran armas, llevaran ametralladoras, ¿qué harían? No me parece que ustedes se guardarían las armas; tengo entendido que echarían plomo a diestra y siniestra desesperados, y que acabarían de una vez y para siempre con toda la tribu; y que además, por último, cantarían victoria, ¿verdad? ¡Eso harían! ¿O guardarían acaso ustedes las ametralladoras? Es obvio que no.

Bien, en una situación similar se encuentran los Extraterrestres: O huyen de nosotros los bárbaros Terrícolas o nos destruyen. Pero como no son Terrícolas, no son asesinos; y prefieren retirarse antes que hacernos daño.

Obviamente, quienes han conquistado el Espacio, tienen que poseer armamento poderoso...  ...Batallón del ejercito formado. Una Nave Cósmica descendió ante el ejército. Posiblemente el capitán quiso, de una vez y para siempre, entrar en relaciones amistosas con los terrícolas. Tal vez pensó que nosotros éramos mansas ovejas, que les recibiríamos con los brazos abiertos, que les llevaríamos a cenar, y que por último les daríamos su “nieve de limón”, pero se equivocó el capitán.

El sargento de aquel batallón ordenó: “¡Fuego contra esos malvados, fuego!”.... El capitán no hizo sino hacer funcionar una lámpara muy extraña, y un rayo azul paralizó las armas y paralizó también los brazos de esos bárbaros de la Tierra. Nadie pudo disparar un solo tiro ni moverse siquiera; y tranquilamente hizo un saludo a los Terrícolas (mientras les tenía paralizados brazos y piernas), subió a su nave y se perdió en el espacio.

Los del batallón quedaron asombrados. Pudieron luego ya caminar tranquilos, mover sus brazos; no habían recibido ningún daño. Si fueran tan perversos los Extraterrestres, habrían acabado hasta con el último soldadito del batallón; mas sólo se propusieron defenderse sin hacer daño.

¿Ustedes no procederían en la misma forma, verdad? Si ustedes se encontraran ante una tribu de caníbales y ustedes armados hasta los dientes, les aseguro que ustedes no serían tan mansos como para no hacer uso de esas armas.

Pues bien, los Extraterrestres han demostrado dos cosas: primero, Inteligencia; segundo, Poder. Sin embargo, me atrevo a decir que han demostrado también un tercer factor: Amor; pues no nos han causado ningún daño.

Cierto hombre que fue llevado al planeta VENUS, se quedó asombrado cuando le hicieron una demostración. Los habitantes de Venus colocaron un pequeño aparato ante un cerro y le dijeron: “¡Observa!” Apretaron un botón y aquel cerro cayó todo hecho pedazos, se desmoronó. Dijo luego: “Si nosotros les enseñáramos a los habitantes de tu mundo Tierra, el uso de estos aparatos, cometerían crímenes espantosos, por eso preferimos callar”...

Así, mis queridos amigos, que vale la pena que tratemos nosotros de eliminar la barbarie que cargamos en nuestro interior: La ira que nos hace tan monstruosos, el odio abominable, el egoísmo sin límites, el miedo, porque todos los habitantes de la Tierra están cargados de miedo: Se arman por miedo, hacen guerras por miedo. ¿Creen ustedes acaso que un hombre llevaría pistola al cinto sino tuviese el temor de que alguien le atacara? ¿Creen ustedes que una nación se armaría con bombas atómicas si no temiera el ataque de otras naciones?

Obviamente, el miedo es la causa causorum de muchos graves errores. El hombre que no tiene miedo no necesita llevar pistola al cinto; la nación que no teme no necesita armarse. El miedo nos hace verdaderamente criminales, en el sentido más completo de la palabra...

En estos momentos de crisis mundial, cuando el planeta Barnard I se acerca a nuestro mundo, en vísperas del Gran Cataclismo, y en instantes en que las naciones se arman febrilmente para la guerra, los Extraterrestres quieren ayudarnos y si nosotros les recibiéramos con los brazos abiertos, cambiaría totalmente el curso de la historia, comenzaría, en verdad, una edad floreciente sobre la faz de la Tierra. ¡Hasta aquí mis palabras!... [Aplausos].

Discípulo. ¿Qué se mide, según la medida “Katún” de los Mayas, a nuestro tiempo, Katún-13, a nuestro tiempo?

Maestro. Con el mayor gusto daré respuesta a esa interesante pregunta. El KATÚN-13 es muy importante. Recuerden ustedes que nuestro Sistema Solar tiene 13 MUNDOS; y eso se les hará raro a ustedes, pero los voy a mencionar: primero, Tierra; segundo, Mercurio; tercero, Venus; cuarto, Sol; quinto, Marte; sexto, Júpiter; séptimo, Saturno; octavo, Neptuno; noveno, Urano; décimo, Plutón; onceavo, Vulcano; doceavo, Perséfone; y treceavo, Clarión...

Los científicos, hoy por hoy, están empezando a captar las vibraciones de Vulcano, el onceavo, pero deben avanzar un poquito más hasta que capten las vibraciones de Clarión.

Esos 13 Katunes guardan relación con los 13 Mundos, y también guardan relación con los 13 CIELOS de que hablan los códices de nuestros antepasados de Anáhuac.

Grandes Sabios han dicho que “el mundo fue creado un 13 de Marzo”. Y es que, en realidad de verdad, cada raza se divide 13 TIEMPOS. Obviamente, esos 13 Tiempos deben dividirse matemáticamente en 13 pedazos de el GRAN DÍA SIDERAL, que tiene 25.968 años.

De manera que los 25.968 años deben dividirse por 13 y sacar el correspondiente resultado. Conclusión: 13 partes de un Día Sideral que consta de 25.968 años.

Cada uno de los 13 Katunes guarda relación con los 13 Mundos; también guarda relación con los 13 SEPHIROTHS de la Kábala y los 3 CÍRCULOS DEL ABSOLUTO; guarda relación con los 13 PLANETAS del Sistema Solar (como son 13 partes del GRAN AÑO SIDERAL de 25.968 años).

Así que, en realidad de verdad, todas las profecías que se han hecho en relación con los 12 Katunes que han ido pasando, se han cumplido matemáticamente; y aguardan los Mayas la última parte, la treceava: El 13 Katún. Se le preguntó a un anciano Maya:

¿Tú hijo lo verá? Respondió:

No, mi hijo no lo verá.

¿Tú nieto lo verá? Respuesta:

Sí, mi nieto lo verá.

Regresé ahora, hace poco, de Palenque, donde estuve en contacto con alguien que estudia bajo la dirección de ciertos Sabios Mayas... Quienes se atrevan a decir que los Mayas fueron unos ignorantes, que no sabían astronomía y etc., etc., etc., demuestran que, verdaderamente, no conocen nada de antropología.

Todavía, hoy en día, los Mayas continúan con sus conocimientos matemáticos y astronómicos; prosiguen en sus estudios, nada los ha podido detener, ni siquiera la bota de los conquistadores. ¡He dicho! ¿Alguno otro quiere preguntar algo?