Capítulo 84
De la gloria de los veinticuatro Invisibles.
Y Jesús contestó y dijo a María: "Qué hay en este mundo que sea como ello, o más bien qué región hay en este mundo que pueda comparárseles? Por lo tanto, ¿en qué soy yo semejante a ellos o mas bien qué soy yo para hablar respecto a ellos? Porque nada existe en este mundo con lo que pueda compararlos, ni forma alguna que se les asemeje. Por ende, nada existe en este mundo que tenga el mérito del cielo, Amén yo os digo: Cada uno de los invisibles es nueve veces más grande que el cielo y la esfera superior y los doce aeones juntos, como ya os lo he dicho en otro tiempo.
Y no existe Luz en este mundo que sea más sobresaliente que la Luz del sol, Amén, amén os digo: Los veinticuatro invisibles brillan diez mil veces más que la luz del sol que está en este mundo, como ya os lo he dicho en otro tiempo. Porque la luz del sol en su forma, en verdad no está en este mundo porque su luz penetra a través de muchos velos y regiones. Pero la luz del sol en su forma en verdad, que está en la región de la Virgen de la Luz, brilla diez mil veces más que los veinticuatro invisibles y el gran invisible antepasado y también el gran Dios triple - poder, como ya os lo he dicho en otro tiempo.
Ahora por lo tanto María, no hay forma en este mundo, ni luz, ni figura que sea comparable a los veinticuatro invisibles y que yo pueda semejarla a ellos. Pero yo os conduciré a vosotros, vuestros hermanos y condiscípulos a todas las regiones de la Altura y os llevaré a los tres espacios del Primer Misterio, exceptuando las regiones del espacio del Inefable, y vosotros apreciaréis todas sus formas en verdad sin ninguna semejanza.
Y si os conduzco a la Altura, apreciaréis su gloria en ella, entonces estaréis vosotros con gran asombro."
En realidad nada hay en este mundo con el que se pueda comparar a los Veinticuatro Ancianos, ni nada que se le asemeje.
Sin embargo, los Veinticuatro Ancianos son las veinticuatro partes autónomas y auto-conscientes de nuestro propio Ser interior profundo.
Nunca debemos olvidar a los siete y a los doce y a los veinticuatro, etc., dentro de nosotros mismos.
Los cuarenta y nueve fuegos son en verdad las cuarenta y nueve partes independientes y auto-conscientes de nuestro real Ser.
Cada uno de los Veinticuatro Invisibles brilla diez mil veces más que la luz del sol físico.
La luz espiritual del sol invisible penetra en muchos velos y regiones suprasensibles.
La luz del sol espiritual resplandece en la región de la Virgen de Luz.
El Sol Cristo brilla diez mil veces más que los Veinticuatro Invisibles.
El Gran Invisible antepasado es "Aeohim", lo divinal desconocido.
El gran Dios Triple- Poder es el Demiurgo Creador del Universo: unidad múltiple perfecta.
El Logos creador es el Santo Triamazikamno. El Verbo, la Gran Palabra.
Los tres espacios del primer misterio son las regiones del Demiurgo Creador.
Las regiones del espacio del Inefable son las regiones de "Aelohim", la divinidad incognoscible.
De la gloria del Destino.
"Y si yo os conduzco a la región de los regidores del Destino, veréis entonces la gloria en la cual ellos se encuentran, y debido a su sobredominante gloria vosotros consideraréis este mundo como la tiniebla de las tinieblas y veréis todo el mundo de los hombres como una mácula de escombros, debido a la gran distancia tan alejada de él y por el gran linaje que es considerablemente más grande que él."
Este valle doloroso del Samsara en verdad es tinieblas de tinieblas donde sólo se oye el llanto y el crujir de dientes.
Los arcontes de la ley viven en la gloria de la luz.
Este mundo es una gran mácula de ruinas y escombros muy lejos del sagrado sol absoluto, en un oscuro rincón del universo.
En los doce aeones resplandece la Luz, mas en este valle del Samsara reinan las tinieblas.
De la gloria de los doce Aeones.
"Y si os conduzco a los doce Aeones, veréis entonces la gloria en que ellos se encuentran; y debido a su gran gloria la región de los arcontes del Destino será considerada por vosotros como la tiniebla de las tinieblas y ésta tendrá para vosotros la condición de una mácula de escombros debido a la gran distancia que está tan alejada de él y por la gran condición que es considerablemente más grande que ellos, tal como os lo he dicho en otro tiempo."
En el treceavo Aeón existen esplendores imposibles de definir con palabras.
Los doce Aeones o Regiones de Luz, a pesar de sus esplendores resultan tinieblas cuando se comparan con las radiaciones luminosas de trecavo Aeón.
De la gloria del treceavo Aeón.
"Y si además os conduzco al Aeón trece, veréis entonces la gloria en que ellos se encuentran; y consideraréis a los doce Aeones como la tiniebla de las tinieblas, y veréis la región de los doce Aeones como tiene la semejanza de una mácula de escombros debido a la gran distancia que está en él y a la gran condición que es considerablemente más grande que el anterior."
Ciertamente los doce Aeones están muy lejos de la luz de la Luz y del Sagrado Absoluto.
De la gloria de los de en medio.
"Y si os conduzco a la región de aquéllos que están en medio, veréis entonces la gloria en que ellos se encuentran; y los trece aeones serán considerados por vosotros como la tiniebla de las tinieblas. Y nuevamente veréis a los doce aeones y el Destino Completo y la orden completa y todas las esferas y todas las otras en las cuales ellos están; tendrán para vosotros la condición de una mácula de escombros debido a la gran distancia que su región dista de ella, y debido a la gran condición que es considerablemente más grande que el anterior."
Los trece Aeones resultan tinieblas de tinieblas ante aquéllos que se encuentran entre el seno de la Gran Realidad y el universo de la relatividad.
Mácula de escombros son los doce Aeones donde moran los arcontes de la ley y el Destino Completo y la orden sagrada que el Logos ha establecido en la naturaleza.
El Destino Completo y la Orden Superior, y todas las esferas de los regidores y todas las esferas donde viven los agentes de la Ley, ciertamente son una mácula de escombros debido a que se hallan muy lejos del absoluto.
De la gloria de los de la derecha.
"Y si os conduzco a la región de aquéllos de la derecha, veréis entonces la gloria en la que ellos se encuentran; la región de los de en medio la consideraréis como la noche que está en el mundo de los hombres. Y si veis en medio, tendrá para vosotros la condición de una mácula de escombros debido a la gran distancia que la región de los de la derecha está considerablemente distante de él."
Los de la derecha también tienen gloria de distintos esplendores.
La región del medio es como la noche en el mundo de los hombres, donde se sufre, se renuncia y se trabaja en la Gran Causa.
De la gloria del Tesoro.
"Y si os conduzco a la Tierra de Luz, que está en el Tesoro de la Luz, veréis la gloria en que ellos se encuentran, entonces los de la región de la derecha los consideraréis como la Luz del medio día en el mundo de los hombres, cuando el sol no ha salido; y si veis hacia la región de los de la derecha, tendrá para vosotros la condición de una mácula de escombros debido a la gran distancia que el Tesoro de la Luz dista de él."
En la Tierra de la Luz, el alma del mundo que está en el Tesoro de la Luz, veréis la gloria de las almas puras.
Entonces evidenciaréis que las almas de la derecha viven en el medio día, es decir, se desenvuelven en los aeones.
Los de la derecha también se encuentran muy lejos del Tesoro de la Luz.
De la gloria de la Herencia.
"Y si os conduzco a la región de los que han recibido las herencias y han recibido los misterios de la Luz, veréis la gloria de la Luz en la que se encuentran, la Tierra de la Luz entonces la consideraréis como la Luz del sol que está en el mundo de los hombres. Y si veis sobre la Tierra de la Luz, ésta la consideraréis como una mácula de escombros debido a la gran distancia que la Tierra de la Luz dista de él, y debido a la grandeza que considerablemente es más grande que el anterior."
La región de aquellos que han recibido la herencia perdida y los Misterios de la Luz, tiene su gloria, sus esplendores, la luz del alma del mundo, luz solar en el mundo de los hombres.
La Tierra de la Luz es como luz del sol, donde moran quienes recibieron los misterios y la herencia perdida.
Sin embargo la Tierra de la Luz es como una mácula debido a la enorme distancia que existe entre el mundo y el Absoluto.