Capítulo 69
Y sucedió entonces, cuando el Primer Misterio terminó de decir estas palabras a sus discípulos, que Tomás se acercó y dijo: "Mi Señor, el que alberga la luz tiene oídos, y mi mente ha comprendido tus palabras. Ahora y por tanto, ordéname establecer claramente la solución a esas palabras."
Y el Primer Misterio respondió a Tomás: "Te ordeno que establezcas la solución de la canción que Pistis Sophía entonara para mí."
Tomás, el Tomás particular de cada uno de nosotros, sólo acepta al Instructor del mundo, al Cristo Intimo dentro de cada uno de nosotros.
El Tomás que existe dentro de cada uno de nosotros, deposita su mente en manos del Cristo Intimo y sólo acepta al Cristo Intimo. El evangelio de Tomás es maravilloso.
Quien deposita su mente en manos del Cristo Intimo y sólo acepta al Cristo Intimo, marcha por el camino de la liberación final y los demonios de la mente no podrán vencerle jamás.
Tomas es uno de los doce dentro de nosotros mismos, una parte de nuestro propio Ser.
La mente de Tomás recibe exclusivamente las palabras del Cristo.
Tomás interpreta la canción de Sophía con las Odas de Salomón.
Tomás respondió diciendo: "Mi Señor, por lo que respecta a la canción de Pistis Sophía, cantada cuando fue salvada del caos, tu poder-luz profetizó antes, a través de Salomón, el hijo de David, en sus Odas:
1. He sido salvado de las ataduras y he volado hasta ti, Oh! Señor.
2. Pues tú has estado a mi derecha, salvándome y auxiliándome.
3. Tú obstaculizaste a mis adversarios y ellos no se mostraron porque tu rostro estaba conmigo, salvándome en tu gracia.
4. Yo fui despreciado a la vista de muchos y condenado, y fui como plomo para sus miradas.
5. A través de ti he obtenido un poder que me ha ayudado; pues tu pusiste lámparas a mi derecha y a mi izquierda, para que por ningún lado me faltase luz.
6. Tú me has amparado con la sombra de tu gracia y yo he mudado capas de piel.
7. Con tu mano derecha me has levantado y me has quitado la enfermedad.
8. Me he vuelto poderoso en tu verdad y me he purificado en tu virtud.
9. Mis adversarios se han retirado de mí y he sido justificado por tu bondad, pues tu apoyo dura toda la eternidad."
Esta es Señor, la solución del arrepentimiento que Pistis Sophía expresara cuando fue salvada del caos. Escuchadla para que pueda decirla abiertamente.
Así pues el mensaje de tu poder luz a través de Salomón: 'He sido salvado de las ataduras y he volado hasta ti, Oh! Señor', representa las palabras de Pistis Sophía: 'Estoy libre de las ataduras de la obscuridad y he venido a ti, Oh! Luz.'
Y las palabras de tu poder-luz: 'Tu has obstruido a mis adversarios y ellos no se han mostrado', son las palabras de Pistis Sophía: 'Y las emanaciones de Obstinado, contra las cuales luchara, tú las obstruiste mediante tu luz y no pudieron acercárseme.'
Y las palabras de tu poder: 'Tu rostro estaba conmigo, salvándome en tu gracia', son las palabras de Pistis Sophía: 'Tu luz estaba conmigo, salvándome con tu rayo de luz.'
Y las palabras de tu poder: 'Yo fui despreciado a la vista de muchos, y condenado', son las palabras pronunciadas por Pistis Sophía: 'Las emanaciones de Obstinado me constriñeron y me quitaron mi poder, y fui despreciada ante ellos y arrojada al caos, sin mi luz.'
Y las palabras de tu poder: 'Me convertí en plomo a sus miradas', son las de Pistis Sophía: 'Cuando ellos me arrebataron mi luz me volví como materia inerte a ellos.'
Y mas aún, las palabras de tu poder: 'A través de ti he obtenido un poder que me ha ayudado', son también las palabras de Pistis Sophía: 'Y luego vino una luz poder a mí, a través de ti, que me ha salvado.'
Y las palabras de tu poder: 'Fui relevado de capas de piel', son las de Pistis Sophía: 'Y me purificaron de mis malas materias y fui levantada sobre ellas en tu luz.'
Y las palabras de tu poder expresadas a través de Salomón: 'Es tu mano derecha la que me ha levantado y me ha quitado la enfermedad,' son las palabras de Pistis Sophía: 'Y tu rayo de luz me levantó en tu luz y quitó de mí las emanaciones de Obstinado que me constreñían.'
Y las palabras de tu poder: 'Me he vuelto poderoso en tu verdad y purificado en tu virtud', son las de Pistis Sophía: 'Me he vuelto poderosa en tu luz y he purificado mi luz en tu rayo.'
Y las palabras de tu poder: 'Mis adversarios se han retirado de mí', son las pronunciadas por Pistis Sophía: 'Las emanaciones de Obstinado, que me constreñían, se han retirado de mí.'
Y las palabras de tu poder expresada a través de Salomón: 'He sido justificado en tu bondad, pues tu apoyo dura toda la eternidad', son las palabras de Pistis Sophía: 'He sido salvada de tu bondad, pues tú salvaste a todos.'
Esta es pues, Oh! mi Señor, la solución al arrepentimiento que Pistis Sophía expresara cuando fue salvada del caos y liberada de las ataduras de la obscuridad."
La Gracia de Cristo nos salva; empero, debemos eliminar, capa tras capa, los múltiples defectos de tipo psicológico.
Obviamente, cada defecto tiene múltiples agregados psíquicos que se procesan en los siete y en los cuarenta y nueve niveles del Ser.
En todo caso, el siete se multiplica por siete, tú lo sabes.
Tomás, realmente no es comprendido, se le desprecia y hasta de le condena por muchos.
Se le califica injustamente de incrédulo y de escéptico por el hecho de no aceptar nada que no venga directamente del Cristo Intimo.
El Poder que ayuda al Iniciado es el Poder del Verbo Solar.
Capas de piel debemos eliminar. En esoterismo significa eliminar capa tras capa de nuestros defectos psicológicos.
La mano derecha del Cristo Intimo- debe limpiar al leproso, sanarlo.
Sólo el Cristo Intimo podrá eliminar de nosotros la inmunda lepra de Lázaro.
Esa es la lepra horripilante de nuestras abominaciones.
Necesitamos purificar la Luz Interior en el Rayo del Cristo Intimo.