Capítulo 73
Y cuando María hubo dicho esto, el Primer Misterio le dijo a ella: "Bien hecho, finalmente María, tú eres bendita."
Y él continuó nuevamente en su disertación y dijo a sus discípulos: "Sophía continuó también en este canto y dijo:
Sophía dice lo que el Señor dice, porque Sophía es el resultado de los múltiples desdoblamientos del Señor.
Sophía continuó su canto.
1. La Luz ha sido mi salvadora.
2. Y ha cambiado mis tinieblas en luz, y ha desgarrado el caos que me envolvía y me ha ceñido con luz."
Y aconteció entonces, cuando el Primer Misterio había terminado de decir estas palabras que Martha se adelantó y dijo: "Mi Señor, tu poder profetizó antaño a través de David acerca de estas palabras:
La Luz salva a Pistis Sophía. Incuestionablemente, sólo la luz de la Luz, el Padre de todas las luces desdoblado en el Cristo Intimo, puede salvarnos.
Martha interpreta el Salmo XXIV.
10. El Señor se ha convertido en mi auxiliador.
11. El ha cambiado mi lamentación en júbilo; él ha razgado mi túnica de duelo y me ha ceñido con alegría."
Y ocurrió que cuando el Primer Misterio hubo escuchado a Martha estas palabras, dijo: "Bien dicho, y muy bien, Martha."
Y el Primer Misterio continuó nuevamente y dijo a sus discípulos: "Pistis Sophía también continuó en el canto y dijo:
El Señor Interior Profundo convierte la lamentación en júbilo, él rasga la túnica de duelo y nos ciñe con alegría.
Mucho se sufre en la Gran Obra, mas el Señor nos salva del Abismo y nos llena de plenitud.
Sophía continúa su canto.
1. Poder mío, entona alabanzas a la luz y no olvides todos los poderes de la Luz que te han sido concedidos.
2. Y los poderes que hay en ti, alaben al nombre de su santo misterio.
3. Quien perdona toda su transgresión, quien te salva de todas tus angustias con las que las emanaciones de Obstinado te han restringido.
4. Quien ha salvado tu luz de las emanaciones de Obstinado que corresponden a la destrucción; quien te ha coronado con luz en su compasión, hasta que te ha salvado.
5. Quien te ha colmado con luz purificada; y tu principio se renovará como un Invisible de las Alturas."
Con estas palabras Pistis Sophía entonó alabanzas, porque ella fue salvada y recordada todo lo que yo había hecho por ella."
La luz que nos ha sido dada o que se nos confiere cuando el ego muere, es la luz del Cristo Intimo.
Los poderes de Pistis Sophía, todas las partes independientes del Ser, deben entonar alabanzas al Señor Interior Profundo.
Sólo el Cristo Intimo puede perdonarnos y salvarnos de todas las amarguras.
No negamos, sin embargo, que el Cristo Intimo confiere el poder de perdonar pecados a su Divina Madre Kundalini, la Mujer- Serpiente.
Las emanaciones de Obstinado nos restringen y amargan la vida.
El Señor nos corona con su luz y nos salva.
El Señor nos colma con luz purificada.
Nuestros principios, renovados por el Señor, resplandecen gloriosamente.