EL AVE DE MINERVA
EL QUETZAL
El Ave de Minerva es el símbolo de la Sabiduría. No poco se ha hablado del Quetzal; pocos son, sin embargo, capaces de entender todo el misterio de este Pájaro Sagrado. El Quetzal es una de las aves más bellas del mundo. Su cola es larga y hermosísima. Sobre su cabeza luce un penacho de belleza incomparable, verde y sedoso. Todo el aspecto de esa ave, nos invita a la reflexión.
El ave de Minerva, el Quetzal milagroso, resulta de las incesantes trasmutaciones del Fuego. ¡El Poder secreto de esta Ave permite al hombre transformarse en dios! Concede metamorfosearse en lo que cada cual quiera. El poder secreto de esa Ave, capacitada para abrir los Chakras, discos o ruedas magnéticas del Cuerpo Astral.
Cuando el Fuego Sagrado de Pentecostés asciende por el canal central de la médula espinal tiene poder milagroso de transformarse en un Ave de Fuego. ¡Y esa Ave es el símbolo del Quetzal! Y es el Ave de Minerva. Y es la clave del Poder Sacerdotal.
EL "ARCANO A.Z.F." Y EL KUNDALINI
El Teúrgo puede hacer uso de ese Poder cuando está trabajando con el "Arcano A.Z.F.". Ya se informó que en la unión del phalo y el útero se halla la Clave de todo poder evidente. Se advirtió ya que, en la vida, el Teúrgo jamás debe eyacular la entidad del Semen. De este modo el deseo refrenado trasmutará al Líquido Seminal en Mágicos vapores sutiles. Tales vapores, a su vez, se trocarán en Energías Criticas, electromagnéticas.
El ascenso de las energías creadoras del Tercer Logos se realiza a lo largo de los cordones ganglionares conocidos en Oriente con los nombres de Ida y Pingalá. Esos son los dos Testigos del Apocalipsis. Esos dos cordones se enroscan en la médula espinal y forman el Caduceo de Mercurio. Cuando los átomos solares y lunares que ascienden por los dos cordones ganglionares, logran hacer contacto en el hueso coxígeo, cerca del Triveni entonces despierta el Fuego Sagrado del Kundalini, la Serpiente ígnea de nuestros Mágicos poderes. El ascenso del Kundalini se lleva a efecto en el canal central de la médula espinal. Y el Kundalini se desarrolla, evoluciona y progresa dentro del Aura del Logos Solar. El Kundalini asciende lentamente de acuerdo con los méritos del corazón. Y los fuegos del corazón controlan el ascenso del Kundalini. ¡Y el Fuego del Kundalini se transforma en el Ave de Minerva!... Lo importante, para ello es conocer la Clave.
MANTRAM EN LA "MAGIA SEXUAL"
Ahora ya no podemos negar a la Humanidad la Llave de los poderes que divinizan. Con gusto vamos a entregar a nuestros discípulos esa CLAVE milagrosa.
Pues bien: durante el trance de Magia Sexual vocalícese este Mantram: JAO RI
Se prolonga el sonido de cada vocal. Y se ordena al Ave Maravillosa del Fuego, que abra, que desarrolle el Chakra que se necesite. Que comienza el desarrollo total de la facultad que más se esté precisando. Estad seguros de que el Ave de Minerva trabajará sobre el Chakra, disco o rueda magnética sobre la cual reciba órdenes supremas.
Es evidente y positivo que esas facultades no se desarrollan instantáneamente. ¡Pero el Ave de Minerva las despertará! Y si se continúa con la práctica, diariamente, esa Ave, ese sagrado Quetzal, desarrollará la facultad ordenada y ambicionada, en forma absoluta. Lo importante es perseverar, no cansarse, practicar diariamente con intensidad fervorosa.
PROYECCIÓN DEL FUEGO A LOS CHAKRAS
El Ave milagrosa del Fuego, proporciona la Clave para proyectar el Fuego del Kundalini a distancia y ayudar así, a los enfermos, o lanzarlo a cualquier Chakra del Cuerpo Astral del estudiante esotérico. Algunos estudiantes proyectarán su Fuego hasta el Chakra Prostático, con el fin de adquirir poderes para poder salir conscientemente en Cuerpo Astral. Otros, lo harán hacia el Chakra Frontal, a efecto de despertar la clarividencia. Otros, lo harán hacia el Chakra de la Laringe, que les conferirá el poder de oír en el Ultra. Este Chakra facilita al Yogui conservar su Cuerpo Físico vivo y perfectamente sano aún durante las Noches Cósmicas. Otros proyectarán el Ave de Minerva al Plexo Solar, el cual capacita a permanecer horas enteras en el fuego sin quemarse. Algunos estudiantes enviaran al Ave Maravillosa al Chakra del Corazón que conferirá poder sobre el huracán, los vientos etc., también se puede remitir el Ave de Minerva al Chakra de los mil Pétalos, situado en la parte superior del cráneo. Tal Chakra proporciona la intuición, la Polividencia, la visión intuitiva, el poder de salir del Cuerpo Físico conscientemente en el Espíritu, en Íntimo, sin vehículos de ninguna especie.
También se puede lanzar el Ave de Minerva sobre los átomos del Cuerpo Físico, y ordenarle preparar el cuerpo para los estados de JINAS.
¡Todos tenemos que aprender a proyectar el Fuego a cualquier rincón del Universo, y a cualquier Chakra del organismo! ¡Así, todos despertaran sus poderes internos!. No vasta encender el fuego hay que aprender a manejarlo inteligentemente para trabajar en la Gran Obra.
RESTAURACIÓN, TRANSFORMACIÓN E INV1SIBILIDAD
Agni es el Dios del Fuego. Este Gran Maestro ayuda a restaurar el Fuego en cada uno de los Siete Cuerpos: El Físico, el Etérico, el Astral, el Mental, etc.
El Teúrgo puede invocar a Agni cuando se mueve en el Astral. Agni concurrirá al llamado.
Y cuando el Teúrgo invoque a Agni, lo llamará "en Nombre de Cristo, por la Majestad de Cristo, por el Poder de Cristo".
Si se ordena al Ave de Fuego que transforme el rostro del Invocador, o que le dé la apariencia de un ave, o de un árbol, ante la vista de los amigos, el Ave operará la transformación y nadie reconocerá al estudiante.
Ahora bien, si proyectamos el Ave de Fuego sobre la mente de alguien que nos acecha para causarnos daño, y ordenamos, así a la mente ajena que no nos vea, entonces seremos invisibles. Pero en este caso, debemos también vocalizar los Mantrams cuyo poder nos hará Invisibles, que son:
IOD HE VAU HE AMOA HE VAU HE A GTA
Jesús el Gran Hierofante que nos enseñó la Gnosis, varias veces tuvo que recurrir a hacerse invisible.
Con el poder del Fuego, se pueden emprender y ejecutar incontables maravillas.
Con el Poder del Fuego podemos transformarnos radicalmente.
¡Con el Poder del Fuego nos convertimos en Dioses!