VIAJES ASTRALES
El Alma está envuelta en un cuerpo fluídico llamado Cuerpo Astral. El Cuerpo Astral es semejante al Cuerpo Físico. Dentro del Cuerpo Astral está el Alma con su Mente, con su Voluntad; con su Conciencia; con sus Sentimientos. Así pues, el Cuerpo Astral es maravilloso; ese es el Cuerpo del Alma. Cuando el cuerpo de carne y hueso está dormido, el Alma se sale del Cuerpo de Carne y Hueso y anda por todas partes. El Alma viaja en su Cuerpo Astral.
Cuando el Rey Nabucodonosor estaba durmiendo en su cama, pensó en lo que debía de ser su porvenir; entonces se durmió. El Alma del Rey se salió entonces del Cuerpo de Carne y Hueso, viajó por entre el plano Astral, y vio una estatua cuya cabeza era de oro; su pecho sus brazos de plata; sus piernas de hierro y sus pies en parte de hierro y en parte de barro cocido.
El Rey mandó a llamar a todos los Magos, Astrólogos, Adivinos Caldeos, para que le adivinasen el sueño de la estatua y le dieran su declaración. No hubo nadie que fuera capaz de contarle el sueño al Rey, pues el no quiso contárselo a nadie. Los sabios, por ese motivo, iban a la muerte. Daniel el Profeta, se fue a su casa y oró al Señor Jehová con sus compañeros y se acostó a dormir tranquilamente.
El Alma de Daniel se salió entonces del cuerpo y vio en el Astral la famosa estatua del Rey Nabucodonosor. Al día siguiente Daniel se presentó ante el Rey y le adivinó el sueño de la estatua y le dio su declaración, es decir la interpretación. El Rey quedó asombrado y Daniel fue colmado de honores.
Así pues, los sueños son las experiencias astrales. Nuestros discípulos deben decir experiencias astrales y no sueños. Nuestros discípulos deben decir anoche estuve en tal punto; anoche estuve en Cuerpo Astral en tal lugar; tuve una experiencia con fulano de tal en tal Templo, etc.
En Cuerpo Astral los Maestros sometemos a los discípulos a muchas pruebas. En el plano Astral y en cuerpo astral, nuestros discípulos reciben en los Templos del plano astral, sus iniciaciones. El Plano Astral es conocido en la Biblia con el nombre de "Monte". En el Monte, Jesús se transfiguró delante de sus discípulos. El Monte es el Astral. Durante el sueño nuestros discípulos están en el Monte. Es interesante que nuestros discípulos se estudien el libro de Daniel en la Biblia. Todas las visiones de Daniel eran en el Monte, en el plano Astral y no en el plano físico. Al despertarse nuestros discípulos de su sueño material, no deben moverse porque con el Movimiento del cuerpo se agita el cuerpo Astral y se pierden los recuerdos. Al despertarse los discípulos deben esforzarse por recordar todos aquellos lugares en donde estuvieron mientras su cuerpo dormía. Deben esforzarse por recordar todas sus experiencias pasadas en el plano astral. Nuestros discípulos no deben contarle sus experiencias a nadie.